Pizarras negras, antiguas. Paredes de madera o muros trizados. Colores de liceo fiscal de provincia. Sanhueza con la bandera chilena en brazos, subido en los pupitres. Sirenas policiales en aumento. Baje despacito, lentamente.
Ahora mismo, por favor. Sanhueza: no pienso bajar. Rector: no, es la ley. Baje, por favor. Rector: no hay otra cosa que podamos, debamos o sepamos hacer. Sanhueza: ya no nos necesitan para eso. Rector: el liceo, es el liceo. Rector: diez Sanhueza: esta es la gloria de la derrota. Rector: ocho Rector: seis Rector: cuatro Rector: dos Rector: uno Rector: cero Estampida de rifles.
El Sr. Desciende decepcionado. Sanhueza: hasta la muerte es un fraude. Silencio absoluto. Sanhueza agita la bandera sin ganas. Sanhueza: viva Chile. Aparecen las manos, los rostros, se cuelgan de los tableros. Suena la tormenta. Sacan la tiza. Voces: El libro. El libro. Loureiro: no hay mapa. Rector: es imposible que se haya perdido el mapa.
Rector: el mapa perdido Loureiro: protestamos Loureiro: no. Loureiro: economato Loureiro: biblioteca Estoy pasando lista. Loureiro: lo que me temo siga siendo cierto. Rector: el mapa no es el territorio. Pregunto por el del ministerio, el que necesitamos para hacer las clases.
Loureiro: la memoria Rector: esto es intolerable Loureiro: no hay mapa Loureiro: no hay nada que decir Repiten la lista. Rector: no estamos muertos. Todo se pierde Sanhueza: sr.
Rector: usted, Sr. Sanhueza, no descuide su clase. Ya conozco esa historia secreta y personal de cada curso. No me gusta. Loureiro: suena terrible. Rector: silencio. Las cosas no funcionan como es debido. Rector: no podemos hacer clases sin mapa. Sanhueza: todo se pierde.
No estaba mi hija. Rector: no mezclemos asuntos personales Rector: Sra. Rector: nada, quiero un vaso de agua. Loureiro: no sabemos si hay agua. Fredes Puerta que se abre. Sanhueza: no hay mapa. Loureiro: no hay mar. Es probable que ya no haya cordillera. No hay territorio. La historia se deshace sin soporte. Chile no existe. Sanhueza: pues me parece un honor. Loureiro: sigamos haciendo clases Sanhueza: ha comenzado la debacle.
La decadencia de occidente. Bello tema. Estimados alumnos, de nada sirve todo lo aprendido. No hay tiempo. No hay espacio. No hay futuro. No hay progreso. No hay pasado. Ni siquiera estamos muertos.
Pasan lista. Fredes: soy el Sr. Fredes: debe haber recibido el nombramiento del ministerio. Rector: Fredes Sanhueza: es el fin de la historia. No hay mapa. Fredes: sr. Rector: veo demasiados rostros. Me encantaba la historia.
Fredes: por eso mismo, vine a resistir con usted Rector: no viene nadie hace mucho tiempo Rector: entonces la historia existe Fredes: bueno, claro Rector: y no en una batalla, ni en una barricada, ni en una ciudad sitiada Toledo Sanhueza: son unos ignorantes.
No saben nada. Miento, dos, miento, tres, miento, treinta y cinco alumnos dicen que Manuel Montt es una calle. El resto no vino. Loureiro: creen que Nueva York es la capital de los Estados Unidos, y que somos parte del imperio americano. Sanhueza: usted me entiende. Tengo problemas. Le dije lo de mi mujer. Menos horas lectivas es menos dinero. Rector: mientras tanto. Loureiro: no ha llegado el sr. Toledo, Rector. Loureiro: no ha vuelto. Rector: no sigan.
Hay muertes dignas y muertes humillantes. Hay muertes heroicas y vidas miserables Loureiro: ah Muoz: alejndose pobrecito Loureiro: alejndose pobre Fredes: quedndose solo qu pasa?
Ruido de tormenta feroz. Sanhueza: son as. Djelas ir. Son as. Fredes: qu ha pasado con todo en este liceo? Sanhueza: Hay algo raro en todos los liceos Fredes: qu pas? Sanhueza: qu pas?
Tengo mis teoras pero estoy cuestionado. No puedo hablar. Fredes: dgame algo. Una pista. Sanhueza: La rectora nos vigila Fredes: ella no era as.
Sanhueza: yo tampoco era as. Usted tambin dejar de ser as. Fredes: as cmo? Sanhueza: as. Fredes: qu me pasar? Sanhueza: no me haga hablar. No me haga hablar, le digo, le digo que no me haga hablar. Por favor, no me haga hablar. Suena el timbre o la campana. Sanhueza: vuelven a protegerse. Se sumergen entre los pupitres. Estampida de bfalos. Emergen como espectros. Los cinco. Loureiro: nos miran. Muoz: nos miran las piernas cuando nos sentamos, s que murmuran.
Muoz: Lorea, se le ven las pantys, las medias, dicen. Loureiro: una vez Muoz: no lo diga, seorita Muoz: no lo diga, seorita. Loureiro: fue solamente una conversacin Muoz: por favor, seorita Loureiro Loureiro: fu con l al caf de la esquina. Me cont de una polola que tena. Me dijo que nadie le explicaba lo que senta una mujer. Que no saba si el amor era el amor, si el cuerpo el corazn Rectora: esto va mal Loureiro: era poeta, es un poeta, a veces me escribe, qu puedo hacer, me acuerdo tanto de l Rectora: est muy sola, eso es todo Sanhueza: todos estamos solos, estamos cada da ms solos Muoz: yo no estoy sola Sanhueza: si no lo est, lo estar Rectora: esta conversacin no es procedente Loureiro: una vez no ms Muoz: no puede quedarse callada?
Loureiro: yo no s que me pas Muoz: pero La miran y se ren que se calle, por favor, que se calle Loureiro: no se rean de mi! Se rean de ti Muoz: no los oas? Loureiro: no oste lo que decan de ti? Se lanzan al combate. Rectora: detngalas, Fredes. Fredes: cmo? Rectora: detngalas, nos estn mirando los alumnos! Fredes las separa. Sanhueza lo ayuda. Las maniatan en pupitres distantes.
Las amordazan. Sanhueza: siempre lo mismo. A veces nos atan Loureiro: conmigo aprenden, con udppfff! Muoz: cllese! Sanhueza: ellas a nosotros. A veces nosotros a ellas. Tendr que acostumbrarse. Rectora: Sanhueza! Ellas se agitan bajo las mordazas. Sanhueza abre la de Loureiro. Loureiro: yo lo v, Sanhueza, lo vi y lo veo siempre sacando la vuelta!
La amordaza de nuevo. Fredes descubre a Muoz. Muoz: Yo lo he escuchado metiendo ideas indebidas en las cabezas de los alumnos! Rector: oremos. IX: Las Pruebas Rectora: me estoy muriendo. Ellos lo saben, el ministerio lo sabe. Debera parar pero Fredes: usted se ha vuelto terrorfica. Sanhueza: a usted tambin le pasar. Rectora: los hay peores.
Fredes: usted era mejor Rectora: todos lo ramos. Qu hace ah? Tenemos que corregir las pruebas Sacan cerros de hojas atadas con elsticos con que va llenando los pupitres. Rectora: stas no son, stas tampoco, stas s, stas tambin, stas no Sanhueza: las pruebas no prueban nada. Fredes: es verdad que se est muriendo? Las arroja a lo lejos.
Todo queda cubierto de hojas. Rectora: lpiz rojo! Sanhueza y el Rector reparten cruces y notas sobre las hojas dispersas. Rectora: corrija, Fredes! Rectora: entrada de los conquistadores a Chile, batallas con los mapuches, caractersticas de los combates entre mapuches y espaoles, muerte de Caupolicn, muerte de Arturo Prat Chacn, muerte de Jos Manuel Balmaceda, muerte Pausa.
Rectora: qu pasa? Sanhueza: hemos terminado. Rector: hay que pasar las notas a los libros Fredes: estas pruebas Rectora: lo nico importante es la nota. Recogen las hojas dispersas. Sanhueza: se da cuenta, Fredes? Fredes: sr. El Rector lo hace callar con un gesto. Todos se imitan. Se amordazan entre s. Esperan X: El Sitio Explosiones. Con cada estampida un montn de hojas se reparte sobre el escenario. Vuelan pedazos de tiza sobre los pupitres.
Es una batalla, pasa volando un borrador. Sanhueza corre a desatar a Muoz y Loureiro. Loureiro: presentaremos un recurso de amparo. La situacin es inaguantable. Somos perseguidas y maltratadas. No se toma en cuenta quines somos, ni qu opinamos. Muoz: por qu nos tratan como muertos? Nueva explosin. Fredes: qu pasa? Muoz y Loureiro chillan. Sanhueza: la plaza est rodeada por los cuatro costados Rectora: otra vez nos rodean?
Muoz: mire el cielo! Rectora: los liberales Loureiro: los espaoles Muoz: los militares Sanhueza: los congresistas Loureiro: los rebeldes Sanhueza: no pasarn! Rectora: son demasiadas batallas El pas no ha descansado nunca? Sanhueza: nunca, seora Rectora Fredes: pero Sanhueza: ficcin, ficcin. Antes de los espaoles nadie nos tomaba en cuenta. Por eso fuimos la nica colonia que le cost plata a la corona espaola maldito dinero nos har mal, el poder nos har mal. Rectora: tengo cncer, Sanhueza Fredes: no es posible Rectora: no soy operable, Fredes Sanhueza: no se puede morir antes del fin del ao acadmico Rectora: la batalla est dentro mo.
Sanhueza: sra. Rectora: yo soy rancagua o la concepcin o iquique Muoz: sra. Rectora: siento como se matan dentro mo, como disparan. Loureiro: lo oigo Fredes: usted no puede morir. Rectora: claro que puedo.
Sanhueza: no nos daremos por vencidos. Fredes: vengan! Lo levantan entre los cuatro al Rector. Sanhueza: patria o muerte! Muoz: venceremos! Loureiro: lucharemos hasta el fin! Sanhueza: envolvmoslo con la bandera Muoz: oh XI: La Bandera Rectora: hay que hacer el acto cvico, dnde est la bandera?
Rector: dnde est la bandera? Sanhueza: no lo s Rectora: usted la tena, Sanhueza, usted estaba encaramado en el techo con ella Sanhueza: no s, fui abatido por las tropas enemigas. Rectora: Dnde est la bandera? Fredes: qu hacer?
Sanhueza: es el fin de la historia. Fredes: no podemos hacer un acto cvico sobre el fin de la historia Loureiro: imposible, la historia no puede terminar Sanhueza: s, si puede terminar No hay imperios, no hay parasos Fredes: el islam! Sanhueza: restos Loureiro: africa! Sanhueza: est retrasados pero ya llegarn Muoz: la muerte Sanhueza: hay dios?
Muoz: tal vez Rectora: la bandera! Sanhueza: pronto no habr tampoco bandera Rectora: eso es lo que ensea en clases? Sanhueza: todo se est llenando de esos lugares que no existen, sin tiempo, sin historia. Desaparece toda sea de identidad. La historia se ha convertido en noticiero de televisin Muoz: lo saba. Lo supe siempre. Sanhueza: muchachos!
Rectora: bjenlo, ya empez de nuevo Sanhueza: en qu pas vivimos? Muoz: yo tengo la culpa. Perd la llave del estante donde estaba la bandera Rector: sra. Muoz: tal vez estoy muy deprimida Rector: no ha ido al doctor?
Muoz: a qu hora? Rectora: venga, abrceme. Muoz: no. Rectora: abrceme. As, pobrecita Muoz: no lo s. Fredes: La Rector se va a morir y no habr bandera que poner a media asta Muoz: lo s, lo s Sanhueza la us Rectora: no hay bandera, cmo era? Fredes: blanco, azul y rojo. Loureiro: y la estrella solitaria Muoz: la ms linda del mundo Todos cantan : no hay otra que se le iguale aunque la busquen con vela. Sanhueza hace arcadas con la cancin.
Loureiro tambin. Muoz tiene un ataque de tos. Fredes se enjuga una lgrima. Rectora: no hay bandera. Dicen que no pueden cubrirle un cheque. Sanhueza: la batalla de llegar al fin de mes Fredes: est haciendo clases! Sanhueza: tome usted mi curso, Fredes. Qu pasa? Sanhueza: cualquier cosa, lo olvidarn todo, y despus usted tambin lo olvidar Loureiro: el banco, el cheque Sanhueza: enseles como vive un profesor, enseles como muere un profesor, enseles, enseles que este sistema convierte a un profesor en nadie o casi nadie Muoz: djeme eso a m, seor Fredes.
Sanhueza: no tengo dinero, seorita Loureiro. Loureiro: llamaron, no s qu hacer. Sanhueza: no tiene usted algo que me preste? Fredes: no me han pagado todava Sanhueza: su esposo trabaja Muoz: no puedo Sanhueza: alguien me puede prestar veinte mil pesos?
Corre y sale. Rectora: recen por el retorno de Sanhueza. Muoz: volver? Rectora: quizs. Rectora: casi, casi, perdimos en el ltimo minuto Fredes: seora Rectora, por qu me hace estas preguntas? Rectora: porque tengo yo la culpa de que usted haya escogido esta carrera.
Porque fu una profesora apasionada que crea en la democracia y en la libertad Loureiro: seora Rectora! Rectora: lleg la hora de hablar, lleg la hora de decirlo todo!.
Voy a morir. Preprense porque voy a morir. No jubilar. Quiero que se me cansen los brazos, los libros quiere morir as, Fredes? Loureiro: est loca Sanhueza intenta deprimirnos. Rector: repita lo que hay que repetir. Sanhueza: no, la historia no es un dogma Loureiro: descubierta por Hernando de Magallanes y Diego de Almagro. Sanhueza: es como una pierna de mujer. Loureiro: como una baguette. Fredes: como un pasillo.
Rector: no es una obra de arte. Un don. Se toma, se agradece, se acepta Se cubren bajo los pupitres, despavoridos. Rector: verifique, fredes. Fredes: afirmativo. Rector: pase lista. La de profesores. Sanhueza: Sanhueza. Sanhueza: loureiro Loureiro: presente. Sanhueza: Toledo Estamos todos. Fredes: bueno, no exactamente Loureiro: ah Sanhueza: hay algo en el aire, o debajo de la tierra.
A lo mejor ya ni siquiera hay aire. Ni tierra. Hay algo raro en todos los liceos No puedo hablar. No me pregunte nada. Una pista. Sanhueza: el Rector nos vigila Sanhueza: no me haga hablar.
No me haga hablar, le digo, le digo que no me haga hablar. Por favor, no me haga hablar. Se sumergen entre los pupitres.
Emergen como espectros. Los cinco. Loureiro: nos miran. Loureiro: nos miran las piernas cuando nos sentamos. Loureiro: murmuran. Loureiro: los pantys, las medias, dicen.
Tal vez yo no sea tan fea. Loureiro: una vez Sanhueza: una vez una alumna, muy linda me miraba Rector: los profesores deben contenerse Rector: no lo diga Rector: esto va mal Sanhueza: siempre lo mismo. A veces nosotros a ellas. Ellas se agitan bajo las mordazas. Sanhueza abre la de Loureiro. Su mirada Rector: me estoy muriendo. Ellos lo saben, el ministerio lo sabe. Rector: los hay peores. Fredes: usted era mejor Rector: todos lo eramos.
Tenemos que corregir las pruebas Sanhueza: las pruebas no prueban nada. Sanhueza: hemos terminado. Rector: hay que pasar las notas a los libros Fredes: estas pruebas Sanhueza: la nota es la prueba. Fredes: lo hice. Rector: bien hecho. El sitio Explosiones. Vuelan pedazos de tiza sobre los pupitres.
Es una batalla, pasa volando un borrador. Loureiro: presentaremos un recurso de amparo. Somos perseguidos y. Rector: los liberales Loureiro: los socialistas Sanhueza: los congresistas Loureiro: los rebeldes Sanhueza: miren los letreros Rector: son demasiadas batallas Tuvimos suerte. Fredes: no es posible Rector: no soy operable, Fredes Loureiro: lo oigo Fredes: usted no puede morir. Rector: claro que puedo. Sanhueza: no nos daremos por vencidos.
Rector: no hay mapa, no hay bandera Loureiro: ni siquiera hay inventario Sanhueza: nos rodean. Loureiro: imposible, la historia no puede terminar Sanhueza: restos Fredes: eso no es verdad Sanhueza: hemos estudiado lenguas muertas. Lo supe siempre. Rector: sra. Fredes: blanco, azul y rojo. Loureiro: y la estrella solitaria Todos cantan : no hay otra que se le iguale aunque la busquen con vela. Loureiro: dicen que no puden cubrirle un cheque. Sanhueza: la batalla de llegar al fin de mes Sanhueza: tome usted mi curso, Fredes.
Loureiro: el banco, el cheque Sanhueza: sra. Sanhueza: su esposo trabaja Rector: un traidor Loureiro: no pregunte Rector: un renegado Rector: no revisen sus cuentas. Pasen lista, despacito. Ni abran el diario, ni miren las vitrinas O'higgins con el brazo en cabestrillo Rector: recen por el retorno de Sanhueza. Rector: porque tengo yo la culpa de que usted haya escogido esta carrera. Voy a morir. Quiero que se me cansen los brazos, los libros, y que el mapa Rector: que me perdone Sanhueza Rector: es la muerte la que viene a salvarme.
La siento llegar. Se numeran. Besan al Rector, uno por vez. Se colocan en sus posiciones rituales. Loureiro: cante usted entonces. Loureiro: puro chile Fredes: no hay bandera. Loureiro: ocultemos su muerte. Fredes: yo Loureiro: el himno termina. Rector: yo no puedo Fredes: no lo creo posible Rector: me decepciona, Fredes. Autor: John Trevor Custis. Pizarras negras, antiguas. Desarrolla tu respuesta.
De la Parra, Marco Antonio. Ril editores. Santiago de Chile. Instituto Nacional de Chile.
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